#Testimonial: Mi periodo con braguitas menstruales

En Marsella conocimos a Margaux, una joven de 29 años que trabaja como Export Manager en la industria textil. Aceptó contarnos cómo nuestras bragas menstruales Elia han simplificado su vida cotidiana. 

Como miles de otras mujeres, Margaux no se sentía cómoda con la protección que utilizaba y quería encontrar otras soluciones.

"Estaba un poco harta de tirar las bragas cada vez que tenía la regla. Entre las manchas y las pequeñas tiras de plástico pegajosas que nunca podía quitarme, debo haber tirado docenas de bragas. Luego estaba la comodidad: las compresas me quemaban la ingle, y cada dos por tres el tampón estaba mal colocado y me estorbaba".

¿Cuáles eran las otras opciones? ¿La taza? No se sintió tentada. "Nunca he probado una, pero lno me gusta la idea de tener un cuerpo extraño de plástico dentro de mí".

Todo empieza con Julie, su cuñada, que sufre menstruaciones muy abundantes e irregulares. Cuando Margaux quiso probar un nuevo tipo de protección menstrual, recurrió a Julie.

"Es lo más alto de la gama bragas menstruales, el Rolls Royce de la protección sanitaria m'dijo Julie". nos dice Margaux, divertida. "Al parecer, había probado otras marcas de braguitas, pero la Elia era la solución más cómoda y saludable para ella..

Convencida por tanto entusiasmo, se dejó tentar por l"¡Aventura!

Margaux confiesa que dudó durante mucho tiempo antes de dar el paso. "Había tres cosas que me desanimaban: lel olor, el lavado y las fugas".

Lo que es importante recordar es que el olor procede de las bacterias de la sangre estancada y húmeda. Con la zona absorbente de fibra de eucalipto de las braguitas menstruales Elia, no hay olores desagradables porque las bacterias simplemente no tienen tiempo de desarrollarse. De hecho, la fibra de eucalipto tiene propiedades antibacterianas que neutralizan los olores hasta 12 horas, lo que también proporciona una sensación de frescor. Y con nuestra lencería no hay riesgo de síndrome de shock tóxico.

"Me daba un poco de reparo tener que aclararlas a mano. Puede que sea una tontería, lo sé, pero me daba un poco de asco... Pero en realidad, no me molesta en absoluto. Quizá porque al fin y al cabo es mi cuerpo, pero no me parece sucio. Los lavo con toda naturalidad. Además, encontré toda la información sobre el lavadoen la página web de Elia :)"

Una de las últimas cosas que preocupaban a Margaux eran las pérdidas, que son una auténtica pesadilla para ella durante la menstruación y a menudo la vuelven paranoica. "No se parece en nada a la ropa interior normal en cuanto a absorción. Al final, después de más de un año de uso, nunca he tenido una fuga, así que ya no me lo planteo".

Una vez disipados los temores y las dudas de Margaux, nos confió que se sentía mucho más libre. "Las dos o tres primeras veces que las utilicé en casa, tenía miedo a las pérdidas, ¡pero ahora lo estoy reviviendo! Son tan suaves como las bragas clásicas, pero absorbentes como un tampón. Francamente, ¡ahora estoy mucho más tranquila!

Al final de nuestra entrevista con Margaux, le preguntamos cómo utiliza, lava y cuida su lencería menstrual. Nos explicó que cuando sale de la ducha, se las pone en ly las viste en s. "Igual que las bragas normales".

En cuanto al lavado, Margaux también explica que después de llevarlo durante varias horas, y cuando llega el momento de ducharse, lo aclara a fondo en su lavabo, hasta que el agua sale clara. "Puedo tardar uno o dos minutos en aclararlo". Cuando el agua sale clara, la escurre y la mete sin doblar en su bolsa de lavado. "Suelo lavarlos antes de 24 horas, para que los pantalones mojados no permanezcan demasiado tiempo en el cesto de la ropa sucia".. También nos confiesa que sólo mete un par de bragas en cada bolsa de lavado, para que no se aplasten demasiado y queden bien lavadas. "A la hora de secarlas, las tiendo al igual que el resto de la ropa. Sin embargo, evito utilizar una pinza en la zona absorbente para no dañarla..

Estamos encantados de haber ayudado a Margaux a encontrar la protección sanitaria adecuada para ella. 

"Tengo 2 pares de bragas Philomène y me las pongo durante 12 horas al día. Los primeros días de mi ciclo no puedo resistirlas. Absorben todas mis pérdidas. Cuando utilizaba tampones y compresas, me cambiaba cada 3 horas más o menos. No necesariamente porque fuera necesario en términos de flujo, sino por comodidad y olor: no me veía manteniendo un tampón puesto más de dos o tres horas seguidas. Con las bragas menstruales, ya no tengo esa desagradable sensación de humedad que tenía antes".

Dicho esto, Margaux admite que sus 2 braguitas no le bastan. Así que ha pedido 2 braguitas ARMANDE más absorbentes, para estar más tranquila en lla primera noche de su ciclo. "En el mejor de los casos, y para estar totalmente tranquila a la hora de lavar, creo que necesitaría muna docena más o menos. Pero poco a poco voy acumulando existencias.

Nos gustaría agradecer a Margaux su tiempo y su testimonio, y estamos encantados de haber podido layudarla a sentirse mejor cada día.

Queremos que todas las mujeres se sientan bien y cómodas durante este periodo del mes, y si hemos contribuido aunque sea un poco a su comodidad, ¡entonces estamos listos!